Osteoporosis

La osteoporosis es una enfermedad metabólica ósea que se caracteriza por la reducción de la masa ósea total, con disminución del contenido óseo. La masa ósea máxima la alcanzamos entre los 25 y los 35 años, y su densidad depende de la genética, de la alimentación, del ejercicio físico y de factores ambientales ( vida en ambientes soleados, contaminación ambiental, estrés...). A partir de los 35 años de edad la masa ósea comienza a reducirse de forma progresiva. Esta reducción se incrementa con el sedentarismo, carencias nutricionales de calcio, magnesio y proteínas (colágeno), el tabaco, la ingesta de alcohol y otras sustancias que interfieren en la remodelación ósea.

La importancia de la osteoporosis radica en el riesgo de fracturas que se pueden producir con caídas o impactos o presiones excesivas sobre un hueso o articulación. ( Los huesos que se fracturan con más frecuencia son el fémur, las vértebras lumbares, y las muñecas)

En esta fotografía aumentada, podemos observar cómo la masa ósea se fragiliza y se vuelve porosa al disminuir la densidad de la trabécula.
Cuando hay osteoporosis, la práctica de ejercicio regular, la ingesta de calcio y vitamina D, el tomar el sol, pueden ser medidas que ayuden aralentizar la evolución de esta enfermedad. Por ello se recomienda:

- Tomar el sol de forma regular y con moderación; evitar abusar sistemáticamente de índices de protección altos.

- La alimentación debe incluir alimentos ricos en calcio (lácteos) y vitamina D (salmón, sardina, boquerón caballa).

Los nutrientes especialmente recomendados son los siguientes:

Nutriente	Fuente
Calcio	Productos lácteos, pescado enlatado consumido con espinas, nueces.
Vitamina D	Pescado, aceites de pescado, carne, lácteos
Magnesio	Cereales, semillas de plantas leguminosas, nueces, cacao, chocolate puro
Fósforo	Queso elaborado con cuajo, trigo sarraceno, pescado enlatado, pescado ahumado consumido con sus espinas, pescado, vísceras, carne, huevos.
Vitamina K	Vegetales: Col rizada, espinacas, brócoli, coles de Bruselas, lechuga, perejil, nueces y algunos aceites vegetales.
Vitamina C	Vegetales: perejil, pimentón, repollo, frutos rojos y cítricos.
Vitaminas del grupo B	Vegetales de hoja verde, semillas de trigo, levaduras, aguacate, soja, guisantes, judías, avellanas, cacahuetes, plátanos, vegetales ricos en almidón, harina, productos lácteos, pollo, huevos.
Fibra soluble	Pan integral
Fibra insoluble	Fibra, granos de cereales enteros, nueces.
Fitoestrógenos	Habas de soja, productos derivados de la soja.

- El ejercicio físico mejora el riego sanguíneo al periostio y al hueso, favoreciendo la remodelación ósea. Es conveniente iniciarlo gradualmente y practicarlo con regularidad.

- Evitar esfuerzos y posturas que impliquen una flexión hacia delante mantenida de la columna vertebral.

- Evitar en la medida de lo posible todo riego de caída o impacto. Las técnicas isométricas en general contribuyen al mantenimiento de los minerales óseos y actúan cómo freno a la reducción en la masa ósea.

Bibliografía:

Ganong. Fisiología Médica. 24ªEdición. Ed. Mac. Graw Hill
Nutritional education in the primary prevention of osteoporosis in perimenopausal and postmenopausa women. Joanna Wozniak et al.
Disponible en:
http://aula.ui1.es/pluginfile.php/193520/mod_resource/content/1/Educacio%CC%81n%2520nutricional%2520en%2520prevencio%CC%81n%2520primaria%2520de%2520osteoporosis.pdf